Disfrutando de la fruta ¡Helado Tropical de Piña!

¿Cómo va ese verano?

Ya acabamos Julio y empezamos la recta final del verano; Agosto.

Yo lo temo.

Para mí Agosto significa calor, mucho calor, un calor insoportable y lo que es peor, calor por las noches.

Voy a reconocer que en lo que llevamos de verano sólo ha habido dos noches en las que he dormido fatal por el calor pero el resto han sido bastante fresquitas, un gustazo.

Pero dicen que a partir del miércoles llega una ola de calor propia del verano 😞

Qué le vamos a hacer... estamos en verano ¿no? Pues tendrá que hacer calor.

Y con este calor sólo apetece comer cosas fresquitas, aunque si me pones un cocido y no te voy a decir que no pero yo soy así, no perdono un cocido ni en verano 😋

¿Y qué tomamos de postre?

¡Pues un helado!

Así que para combatir el calor extremo que nos espera he hecho un helado bien fresquito y casi sano que os va a encantar. Yo he probado la mezcla sin congelar y estaba bueno así que imaginad cuando esté bien frío 😉

Además, he estrenado mi molde de helado en forma de piña que compré en CASA Shops y el resto lo he echado en un recipiente hermético pasa sacar bolas aunque podéis hacer polos normales.

La receta es de un blog del que ya os he hablado pero que había abandonado un tiempo, Passion for Baking, la receta está en inglés pero yo os la traigo totalmente traducida.

Es muy simple y refrescante.

¡Vamos con la receta!

Helado Tropical de Piña

Ingredientes:

 - 500 gr de piña congelada

 - 100 ml de zumo de limón natural bien frío

 - 150 gr de leche condesada fría

Para esta receta he usado piña natural para que la receta fuera lo más healthy posible aunque lleve leche condesada.

Pelamos y limpiamos la piña, la partimos en trocitos pequeños y la congelamos en una bolsita.

Exprimimos los limones para sacarles el zumo y refrigeramos unas horas.

Ponemos la piña en la trituradora y trituramos hasta tener un puré suave sin ningún trozo de piña. Añadimos el resto de ingredientes y volvemos a triturar hasta que la mezcla sea totalmente homogénea.

Vertemos la mezcla en los moldes de polos o en un recipiente hermético tipo tupper y lo congelamos unas horas, yo siempre lo dejo una noche.

Ya sabéis que para desmoldar los polos es más fácil si los ponemos debajo de agua caliente unos segundos, y para sacar las bolas de helado podemos sacar el recipiente del congelador unos minutos antes de consumir y, además, meter la cucharada de helado en agua caliente.

Al natural está delicioso pero podemos acompañarlo con un poco de nata montada o incluso con un chorrito de ron si no lo van a comer niños 😉

Los helados son una buena forma de dar a los niños fruta y cuanto más naturales los hagamos más buenos estarán 😊

¡Hasta pronto!

"Todos los días son un buen día" ¡Tarta Arcoiris!

Como ya sabéis, el domingo pasado fue el primer cumpleaños de mi ahijado Martín.

Pero por unas cosas y otras no se pudo celebrar como lo teníamos pensando, así que lo hemos retrasado una semana.

Así que aquí estamos, celebrando el primer cumpleaños del chiquitín.

Que no todos los días se cumple un añito 😊

Y aunque aún sea muy pequeño y no se entere de las cosas nos hace más ilusión a los adultos, además, dentro de unos años podremos enseñarle fotos de cómo pasó su primer cumpleaños.
Además, hay regalos que son para siempre, como su Tarta Falsa de Fondant que ya os enseñé en otro post.

Pero no podía dejar pasar un cumpleaños sin hacer una Tarta Real con su bizcocho, su crema y toda su decoración.
Si es que lo que más me gusta es decorar y darle mi toque personal.

Para cada cumpleaños intento hacer una tarta distinta, así voy probando nuevos sabores y sobre todo nuevas combinaciones y si me gustan pues las perfecciono si es que hay algo que perfeccionar.

Y en este tipo de cumpleaños intento que sean tartas buenísimas y preciosas porque la primera impresión es la que cuenta y sé que en la repostería se come mucho por los ojos.

Así que me puse manos a la obra a buscar diseños de tartas con crema para cumpleaños de niños y casi todas eran demasiado "planas" y yo quería algo llamativo y colorido, algo que se quedara guardado en la memoria de cada uno de los invitados y, si fuera posible, en la de Martín.

Y así fue como me topé con esta Tarta de pétalos Arcoiris

¿No es preciosa? Yo me enamoré nada más verla.
Me hubiera encantado que fuera para mi cumpleaños pero creo que pega mucho más en esta época que en invierno 😉
Así que para mi chiquitín lo mejor.

Tengo que decir que al principio me agobié mucho porque sólo tenía una boquilla redonda y necesitaba 7 para todos los colores pero después caí en que se puede hacer sin boquillas, así que no os volváis locos buscando las boquillas 😅

Y ahora vamos con las recetas.
Para esta tarta he usado como base el Bizcocho de chocolate tan alto y esponjoso que hice cuando me arreglaron el horno.
Para el molde de 18cm hice 1 receta y media.
En cuanto a la crema, he usado una receta que aprendí cuando hice el curso de Drip Cakes en Jessica Cakes, estaba muy buena y además tiene una textura super suave, así que es la receta que os voy a dejar hoy además del tutorial de cómo hice la tarta.

¡Vamos allá!

Tarta de Pétalos Arcoiris

Ingredientes:

 - 1 bizcocho de chocolate de 18 cm

 - 700 gr de Buttercream de Merengue Suizo

Ingredientes Buttercream Merengue Suizo:

 - 150 gr de claras pasteurizadas o frescas

 - 250 gr de azúcar

 - 350 gr de mantequilla a temperatura ambiente

 - 1 cucharadita esencia vainilla

Empezamos elaborando el bizcocho de chocolate como su receta indica y dejamos que enfríe tranquilamente mientras elaboramos las crema, para esta tarta he doblado las cantidades que os pongo arriba, sobra un poco pero para los "por si acaso".

En un bol ponemos las claras con el azúcar al baño María y removemos continuamente para que no cuajen las claras hasta que se disuelva el azúcar y la mezcla llegue a 60ºC.

Ponemos la mezcla en el bol de la batidora y comenzamos a montar a velocidad baja, iremos subiendo la velocidad poco a poco hasta que se monten por completo y el bol esté frío.

Con este no se pondrá frío pero sí estará menos caliente que cuando lo hemos echado.

Añadimos la mantequilla en cubitos a velocidad baja y batimos hasta que tengamos una mezcla suave y sedosa, si se corta no pasa nada, se arregla batiendo más tiempo, no os asustéis.

Incorporamos la esencia de vainilla y batimos un poco hasta integrar.

Cortamos el bizcocho en las capas que queramos, si veis que está muy seco podéis almibararlo un poco pero no creo que sea necesario.

Con la crema anterior empezamos a rellenar el bizcocho, cuando tengamos toda la tarta montada será la hora de poner la "capa sujetamigas".

Para los que no lo sepáis, la "capa sujetamiga" es una capa finita que hará de barrera entre las migas de la tarta y la crema que se verá de la tarta.

Después de aplicarla y, por supuesto, alisarla la meteremos unos minutos en el frigorífico para que coja consistencia.

Mientras dejamos que la tarta enfríe, dividiremos la crema en 7 partes iguales y lo teñiremos de los colores del arcoiris; amarillo, verde, azul, turquesa, rojo, naranja y violeta.

Metemos la crema en las mangas pasteleras y cortaremos la punta de la medida que queramos aunque hay que ser consecuente con la altura de la tarta ya que tienen que aparecer todos los colores,además, el corte debe ser limpio.

Aquí llega lo más entretenido de la Tarta; la decoración.

1. Sacamos la tarta de la nevera y ponemos un punto de cada color de crema de manera vertical.

2. Con una espátula pequeña aplastaremos y esparciremos la crema suavemente.

3. Haremos la misma operación pero con un color diferente, cambiando el orden, para que al final el mismo color se va como una diagonal. Si miráis la foto lo entenderéis mejor 😅

Y seguro que os preguntaréis ¿y por encima cómo lo hago?

Pues exactamente igual, recordad que hay que alternar los colores para que quede más colorida, si os coincide un color no pasa nada.

Esta vez lo aplastaremos hacia el centro hasta que al final hagamos un punto de crema en el centro

¡Y ya tenemos nuestra Tarta Arcoiris lista!

Es muy fácil de hacer aunque lleva su tiempo pero merece la pena después de ver el resultado ¿verdad?

Yo ni me lo pensé un segundo, sabía que estar tarta era para Martín.

Además, hice un pequeño banderín para decorarla aún más 😉

Si buscáis por internet hay muchas versiones de esta tarta, se puede hacer con un sólo color o con un degradado con el mismo color, la verdad es que todas quedan preciosas 😊

Os animo a intentarlo.

¡Hasta pronto!

Básico en helados ¡Azúcar Invertido!

Se podría decir que estamos en la mitad del verano y que ya sólo queda Agosto para volver a la rutina y ¿quién sabe? al frío también.

Y estos días he echado muchísimo de menos el frío.

Bendito frío.

Con lo bien que se duerme tapado... y es que con este calor es imposible taparse aunque se duerme bien.

Una de las partes buenas del verano son los helados.

Me encanta hacer helados.

Ya sabéis que este año me ha dado por hacer helados raros aunque no dejo de lado los tradicionales, así que aquí os dejo una lista de todos los helados que ya he hecho.

1. Helado de Vainilla (con máquina)

2. Helado de Nutella

3. Helado de Chocolate (Azúcar Invertido)

4. Helado de Nata

5. Helado de Chicle

6. Helado de Filipinos Blancos

7. Helado de Café

8. Helado de Vainilla (sin máquina)

9. Helado Puerto de Indias

10. Helado de Kinder

11. Polos de Plátano

12. Helado de Agua de Valencia

Aún queda mucho verano por delante así que no descarto hacer más helados pero esta vez de sabores tradicionales y usando más fruta.

¿Y a qué viene esto de los helados?
Pues muy simple.

Muchos de los helados que he hecho llevan un ingredientes que se llama "Azúcar Invertido" y mucha gente no sabe lo que es o no tiene acceso a ello.

Así que hoy vamos a poner solución a ambos problemas.

De todos modos, en la entrada del Helado de Chocolate tenéis una explicación un poco más extendida, no dejéis de aprender 😊

Lo primero decir qué es el azúcar invertido.

Teóricamente es una reacción en la que se rompe la sacarosa en sus elementos básicos; fructosa y glucosa.

El azúcar invertido más natural que podemos encontrar en los supermercados es la miel.

Así que si en una receta te piden azúcar invertido, lo puedes sustituir con miel en la misma proporción pero recordad que la miel da sabor.

Este ingrediente lo podemos encontrar en tiendas especializadas de repostería como María Lunarillos, Mega Silvita, My Karamelli... o lo podemos hacer nosotros 😊

Hay miles de recetas por internet, la más famosa es la que usa sobres de gasificantes pero si no los queréis comprar, estáis en el lugar indicado.

La receta la he sacado de Directo al Paladar, es una web muy interesante que os recomiendo mirar.

¡Vamos con la receta!

Azúcar Invertido

Ingredientes:

 - 375 gr de azúcar

 - 150 ml de agua mineral

 - 1 cucharadita de zumo de limón

 - 1 cucharadita bicarbonato

Antes de nada, es necesario tener un termómetro de repostería ya que tenemos que llevar la mezcla hasta los 100ºC y después bajarla hasta los 50ºC así que no es algo opcional, obligatorio tener un Termómetro.

En un cazo echamos el azúcar con el agua y el zumo de limón, lo calentamos a fuego suave hasta llegar a los 100ºC. El azúcar ya se habrá disuelto y tendremos una mezcla totalmente transparente.

Retiramos del fuego y dejamos que enfríe hasta los 50ºC mientras removemos de vez en cuando suavemente.

Añadimos el bicarbonato y removemos bien hasta que se haya integrado. Al principio se pondrá turbio, pero según se va enfriando aparecerá una capa blanca encima, la retiramos por completo y conservamos en un tarro de cristal limpio.

El azúcar invertido puede dura hasta 6 meses si lo conservamos bien así que tenéis un margen muy amplio para usarlo.

Yo lo uso principalmente para el Roscón y los Helados aunque hay muchas recetas de bizcochos que te pide azúcar invertido, así que no viene mal tener un tarro por casa.

Es muy fácil, la única dificultad es seguir las temperaturas, por eso digo que es muy importante tener un termómetro de repostería a mano ya que hay muchas recetas que te lo van a pedir.

Es una inversión que merece la pena.

Ahora que sabéis cómo hacerlo poneos manos a la obra y elaborad todos los helados que queráis 😉

¡Hasta pronto!

¿Qué es un Dummy? ¡Tartas falsas de fondant!

¿Dummy? ¿Eso qué es? ¿Se come?

Hay muchísimas preguntas sobre los Dummies y la verdad es que las respuestas son muy sencillas así que empecemos por saber lo más básico de los Dummies.

¿Qué son?

Los Dummies son plataformas o bases de poriexpan, las podemos encontrar de diferentes formas; cuadradas, rectangulares, redondas, esféricas... y de diferentes medidas.

Seguro que ya os va sonando.

¿Para qué sirven?

Como tienen forma de tarta son ideales para practicar con el fondant antes de ponerse con una tarta real y como ya he dicho, hay de muchas formas así que la variedad no falta.

Aunque no solo sirven para forrarlas con fondant, sirven como apoyo para hacer modelados.

¿Por qué Dummies y no tartas reales?

Las tartas reales llevan mucho trabajo detrás y tienen su gasto tanto en materias como en electricidad, además, deben conservarse adecuadamente para que el paso del tiempo no afecte a su estructura.

En cambio, los Dummies, al ser simplemente poriexpan sólo tenemos que mantener el exterior sin preocuparnos de la conservación del interior, además, son más económicos y rápidos que las tartas reales.

¿Para qué las usamos?

Hay muchos usos pero creo que el principal es para crear Tartas Falsas para exposiciones.

Al no tener ninguna conservación especial podemos tenerlas mucho tiempo expuestas en escaparates, en ferias, Mesas Dulces...

¿Se pueden vender?

Por supuesto.

Aunque aún hay muchas personas que no saben ni que existen se pueden ofrecer como alternativa a una tarta real, para hacer el paripé.

Normalmente se cobran un 30% menos que las tartas reales.

Es decir, si una tarta real de fondant me cuesta 40€, el Dummy costará 28€ (el 70% de 40)

Ya que lo que más suele costar el fondant y todos los detalles.

¿Se nota la diferencia entre los Dummies y las tartas reales?

Para nada.

Visualmente no hay ninguna diferencia ya que dan el pego completamente, incluso habrá gente que te pregunte si se pueden comer 😋

¿Qué necesito para usar los Dummies?

Nada que no tengas por casa o que no hayas usado ya.

Sólo necesitas el Dummy, agua, fondant y todas las herramientas de fondant que quieras.

Tengo todo ¿cómo empiezo?

Es muy fácil.

Primero tienes que estirar el fondant como lo harías para forrar una tarta real, usando tu rodillo, un poco de maicena si se pega, alisándolo de vez en cuando... Todo normal.

Cuando tengamos el fondant, mojamos el Dummy con un poco de agua y ponemos encima la plancha de fondant.

Lo primerísimo que hay que hacer es salvar los bordes para evitar que nos corte el fondant y después iremos pegando el resto con mucho cuidado de no tirar hacia abajo porque se cortaría.

Cuando tengamos todo, cortamos el exceso y alisamos con la paleta.

Nada que no hagamos con una tarta real.

¿Dónde los compro?

En tiendas de pastelería como María Lunarillos, My Karamelli, Cocina y Repostería, Mega Silvita entre otras, o si tienes mucha suerte, en los chinos.

¿Qué ventajas tiene?

Como ya he dicho antes es una opción muy económica para practicar fondant e incluso como regalo.

Seguro que habréis escuchado "es que me da pena comérmelo" así que con los Dummies eso se acabó.

Puedes conservarlas todo el tiempo que el fondant dure, se recomienda guardarlas envueltas en film para que duren más tiempo pero es opcional.

El único gasto que tendrías es el fondant y los elementos de decoración que quieras añadir, además de tu tiempo.

Como pesan muy poco puedes hacer espectaculares tartas de pisos, quedan preciosas, no pesan nada de nada y es que parecen reales.

Puedes recrear cualquier tarta con un Dummy, pero hay excepciones.

No hay ninguna limitación en cuanto a decoración, en cuanto se forra de fondant es como una tarta real así que puedes decorarla como quieras.

¿Y las desventajas?

Todo tiene su parte mala y los Dummies no iban a ser menos.

Al pesar muy poco cuesta un poco forrarlas porque se mueven muchísimo. Se pueden pegar a la base o atravesarla con una brocheta para sujertarla.

También hay que tener cuidado con los bordes ya que son más afilados que los de las tartas reales y pueden llegar a cortarte el fondant y tendrás que volver a empezar.

Aunque puedes hacer cualquier tarta en Dummy, tiene sus limitaciones, las tartas talladas o con crema tienen que hacerse con bizcocho.

Como son "tartas desconocidas" no hay mucha aceptación y cuando dices que no se pueden comer la gente se niega a pagar lo que vale realmente.

Y hasta aquí el post de hoy.
Como veis, ha sido una guía básica para empezar a manejar Dummies si alguna vez queremos trabajar con ellos.
No es imprescindible pero muchas veces es bueno tener alguna Fake Cake para decorar un evento o simplemente tenerla de recuerdo.

La tarta azul del elefante es un regalo para mi ahijado que este domingo cumple ¡1 añito!
Así que cuando sea mayor verá y tocará su primera tarta de cumpleaños 😊

¡Hasta pronto!

Salsitas ricas ¡Salsa Bolognesa!

¿Os acordáis cuando hice Salsa Carbonara?

¿La habéis probado ya?

Yo me muero de ganas de volver a probarla sobre pizza...

Hablando de pizza, espero que hayáis probado la receta de masa de pizza casera que hice hace algún tiempo y aunque ya os lo dije lo vuelvo a repetir, no os arrepentiréis 😉

Volviendo al tema principal, en el anterior post os enseñé a hacer Pasta Fresca casera 100% sin conservantes y totalmente natural así que, hoy, para completar un poco más vamos a acompañarla de una buena salsa.

¡Salsa Bolognesa!

No digo que las otras salsas sean malas pero ya sabéis que tengo predilección por las tradicionales y esta es una de mis favoritas.

Es la segunda vez que la hago y la verdad es que me encanta.

Sólo la he comido con pasta pero en una pizza o como relleno tiene que estar espectacular.

Hay mil recetas por internet pero la cocina es muy volátil así que podemos hacer los cambios que queramos porque la base no va a cambiar, por el contrario, en la pastelería no podemos hacer estos cambios.

Las cantidades están pensadas para 4 personas y la podéis usar para cualquier plato; pasta, pizza, relleno de empanadillas, puré... Lo mejor es innovar 😉

¡Vamos con la receta!

Salsa Bolognesa

Ingredientes:

 - 500 gr de carne picada de ternera

 - 1 cebolla grande

 - 1 zanahoria grande

 - 2 tomates de pera

 - 5 cucharadas de tomate frito

 - 100 ml de vino blanco 

 - 5 cucharadas de leche

 - Sal

 - 1 cucharadita de ajo en polvo

 - 1/4 cucharadita de pimienta negra

Antes de empezar deciros que las cantidades de la leche y de las especias van en función del gusto de quien lo vaya a comer, yo he usado estas cantidades pero podéis cambiarlas sin ningún problema, la receta saldrá igual pero con otro sabor.

Pelamos y cortamos la cebolla y la zanahoria en brunoise o en trozos pequeños. Lo pochamos en una sartén con un poco de aceite hasta que dore.

Añadimos la carne picada salpimentada y cocinamos hasta que la carne empiece a dorarse, añadimos el vino blanco y dejamos que se evapore.

Cortamos los tomates en brunoise y los añadimos cuando el alcohol se haya evaporado, incorporamos la salsa de tomate y removemos, dejamos cocinar unos 30 minutos a fuego lento.

Yo he dejado que se siga cocinando al menos 1 hora mientras le añadía las especias y además, la leche para que no se quedara del todo seco. 

¡Ya tenemos nuestra Salsa Bolognesa para acompañar cualquier plato!

Hacer este tipo de salsas es muy fácil aunque lleva su tiempo y es que casi cualquier buena comida lleva su tiempo de cocción y cuanto más cueza más bueno estará.

"Sabiduría de Abuela"

¡Hasta pronto!

Con las manos en la masa ¡Pasta fresca!

Desde que empecé el Grado Superior de Cocina me surgió la necesidad de hacer todas, o al menos la gran mayoría, las comidas caseras.

¿Qué quiero decir con esto? Bien, hacer un plato completo con lo que tuviera en casa.

Empecé a plantar mis propias hierbas aromáticas, mis propias hortalizas y mis frutas.

Primero empecé con el pan, ningún fin de semana comprábamos pan porque lo hacía yo y era un auténtico placer llenar la casa del olor de pan recién hecho.

Mi siguiente objetivo eran los Roscones, desde que empecé a hacerlos sólo compramos uno pequeño relleno de trufa porque me encanta disfrutar de algún postre que no haya hecho yo.

Y desde hace un año quise dar el salto a la Pasta Fresca pero quería usar la máquina de pasta aunque en verdad no es indispensable tenerla pero sé cuanto agiliza el trabajo.

Así que este año, ni corta ni perezosa, me he comprado la máquina de pasta que anuncian todos los años en el Lidl.

Ya os habré contado cuánto me gusta el Lidl, no he tenido problemas con sus productos y además, me parecen de muy buena calidad, así que cada vez que veo algo que me gusta anunciado en el Lidl no dudo en cogerlo.

La cosa es que yo ya tenía una receta de Pasta fresca guardada pero sin máquina no me voy a poner a hacerlo porque soy así.

Así que ahora que tengo la receta, la máquina, la sémola y muchas ganas me puse manos a la obra a elaborar Pasta Fresca.

Antes de nada, la receta la he sacado del Blog de Maria Lunarillos donde lo explican paso a paso y ya veréis como es muy fácil y cualquiera puede hacerlo.

La fórmula base que se explica en el Blog es 100 gr de sémola o harina con 1 huevo por persona.

Esta fórmula depende de muchas cosas, os animo a leer el post para saber más de la pasta.

Yo he hecho dos versiones, una con sémola que lo podéis encontrar en Mercadona y otra con Harina 00 que es la harina de trigo que usamos para todo.

Así puedo ver cuál me convence más y para la próxima hacer una apuesta segura.

¡Vamos con la receta!

Pasta Fresca

Ingredientes:

 - 300 gr de sémola de trigo o Harina 00

 - 3 huevos

 - Una pizca de sal

Empezamos haciendo un volcán con la sémola o la harina, en el centro echamos el huevo con la sal y batimos añadiendo desde los lados el sólido.

Mezclaremos hasta que obtengamos una masa pegajosa y que podamos manejar con las manos. Empezaremos a amasar, lo podéis hacer a máquina pero a mí me gusta toquetear las masas.
Amasaremos hasta que tengamos una masa elástica y casi lisa. La mejor forma de comprobarlo es apretarla con un dedo y si recupera su forma rápidamente ya la tendremos lista.
Si se os ha quedado muy húmeda podéis añadirlo un poco de sémola o harina, al igual que si os ha quedado muy seca podéis añadir un poco de huevo o agua.

La cuestión es ajustar esta receta a nuestras necesidades así que id probando.

¿Véis la diferencia entre sémola y harina?

La envolvemos con film y dejamos reposar una media hora. La partimos por la mitad para poder manejarla mejor y la estiramos un poco para ayudar a la máquina de pasta.
La metemos en la máquina con el número más alto y vamos reduciendo hasta llegar al 4 ó 5 si queréis tallarines aunque el grosor depende de vosotros pero cuanto más fino sea será más difícil de manejar.
Tened mucho cuidado porque la pasta se seca con mirarla así que evitad dejarla expuesta al aire.

Después de tener todas las planchas estiradas usaremos el accesorio para cortar tallarines y los pondremos a secar en una bandeja con un poco de sémola o harina para evitar que se peguen entre ellos.
Si tenéis un secador de flores podéis colgarlos allí, es como un secador de pasta 😉

Cuando la tengamos seca pondremos a hervir agua con un poco de sal aunque es opcional. Cuando el agua hierva echaremos la pasta y la coceremos unos 13 minutos aproximadamente. Yo la tuve ese tiempo y se me quedó un poco durita pero es como me gusta.

¡Ya tenéis la pasta lista para comer y acompañar con cualquier salsa!

Ya habéis visto que es muy fácil y además sale riquísima.

Si vais a comer la pasta en ensalada os recomiendo que la aliñéis porque está un poco insípida pero si la coméis acompañada con otra cosa cogerá otro sabor.

Respecto a la diferencia entre la pasta con sémola o con harina, la verdad es que al tacto sí se nota pero en el sabor apenas noto la diferencia.

La pasta con sémola sabe un poco más fuerte que la de harina que es suavidad absoluta pero creo que si me pusieran dos platos con pasta y me pidieran que las diferenciara, no sería capaz.

De todos modos, no viene mal probar las dos formas de hacer pasta, así te familiarizas con el sabor de la sémola y pruebas cosas nuevas.

Mi nota para ambas pastas es un 10 😊

En el próximo post os cuento con qué acompañé esta deliciosa pasta, aquí os dejo un adelanto 😉

¡Hasta pronto!

Helados alcohólicos ¡Helado de Agua de Valencia!

Hace algunos años empezaron a salir los helados más raros del mundo.

Y digo raros porque nadie se imaginó que podía ser helados.

Nadie excepto las personas que lo hicieron realidad.

¿Qué se les pasaría por la cabeza?

Muchas veces pienso que fue una apuesta o el típico español de "¿A qué no te atreves...?

Y fruto de ello aparecieron los Helados de cocido, los Helados de callos y como no, los Helados de Fabada.

No los he probado. No quiero hacerlo.

Con saber que existen ya me perturba bastante.

Pero no contentos con esos sabores, este año han salido los Helados de Puré de patata, Helados de Alioli, Helados de Jamón , Helados de chipirones en su tinta, Helados de cebolla...

Por favor, señores heladeros, parad.

Creo que el mundo no necesita esos sabores en Helado, están bien en su platito.

Pero no todos los sabores nuevos son tan malos, hay Helado de Calimotxo, Helado de Donuts y Helado de Cerveza.

Así que, después de mi Helado de Puerto de Indias, decidí convertir otra bebida alcohólica en helado y la que primero me vino a la cabeza fue el Agua de Valencia.

Pero no el Agua de Valencia que todos conocemos y que venden ya hecha, yo quería el Agua de Valencia de mis recuerdos.

El que bebía hace algunos años, totalmente casero, y que no sabía nada a alcohol pero sí que lo llevaba.

¡Ese quiero!

Así que me puse a hacer pruebas, porque los ingredientes sí los sabía, me faltaban las cantidades.

Y después de más de 20 chupitos conseguí elaborar un Helado de Agua de Valencia que creo que gustará a todo el mundo porque no sabe mucho a alcohol hasta el regusto final.

La receta base del Agua de Valencia lo podéis encontrar en Internet pero yo he modificado la base para suavizar el sabor un poco más, así que si está muy fuerte podéis suavizarlo como más os guste.

La receta base es 2 partes de zumo de naranja, 2 partes de cava semiseco, 1 parte de vodka, 1 parte ginebra y azúcar al gusto. Si queréis acentuar el sabor de la naranja podéis añadir un chorrito de Cointreau.

Yo he hecho dos versiones, una con cava y otra sin cava.
¡Aquí vamos con mi receta!

Helado de Agua de Valencia

Ingredientes:

 - 400 ml de zumo de naranja (si es natural mejor)

 - 50 ml de cava 

 - 50  ml de ginebra blanca

 - 50 ml de vodka blanco

 - 250 gr de azúcar

 - Rodajas de naranja

Ingredientes:

 - 350 ml de zumo de naranja

 - 50 ml de ginebra

 - 50 ml de vodka

 - 70 gr de azúcar

 - Rodajas de naranja

Las instrucciones para ambas recetas son las mismas así que vamos a ello.

Mezclamos todos los ingredientes en una botella y agitamos hasta que todo se haya integrado, sobre todo el azúcar. Metemos las rodajas de naranja en la botella para que coja más sabor.

Lo metemos en la nevera y refrigeramos unas horas para que la mezcla esté bien fresquita.

Echamos la mezcla en un recipiente hermético y congelamos al menos dos noches para que se solidifique bien.

Este helado tiene la misma textura que el de Puerto de Indias ya que al contener alcohol no se puede suavizar como cualquier otro helado, así que la textura será de granizado.

Está buenísimo y os aseguro que merece la pena tenerlo en casa para cualquier cena con amigos porque es un sabor que no se espera.

Sorprenderéis a cualquiera.

Os vuelvo a recordar que al no estar expuesto al calor el alcohol no se ha evaporado así que tened cuidado.

¡Hasta pronto!

Hazlo tú mismo ¡Tutorial Sprinkles Fondant! ¡Me graduo!

¿Os acordáis cuando compartí los Spinkles caseros de glasa?

Ya visteis que eran muy fáciles de hacer.

Hoy os voy a enseñar cómo hacer otro tipo de Sprinkles, esta vez con fondant.

No hace falta que compréis fondant para estos Sprinkles ya que podéis hacerlos con los sobrantes que tengáis por casa porque se necesita muy poquito fondant.

Además, no necesitamos materiales muy específicos aunque nunca viene mal tener este tipo de cortadores por casa.

Primero os contaré lo que necesitamos para estos Sprinkles y después nos ponemos manos a la obra con el Tutorial, que ya veréis que es incluso más fácil que el anterior. 

¡Vamos allá!

Sprinkles Fondant

Materiales:

 - Fondant de colores

 - Boquilla redonda 

 - Cortadores expulsores pequeños

 - Rodillo de fondant pequeño

 - Maicena

 - Tabla de corte de silicona o plástico

 - Bolsitas de plástico de zip

Antes de empezar, si trabajáis mucho con fondant os recomiendo comprar unas tablas/láminas de plástico para cortar, así no estropeáis los tapetes de silicona. Yo las compré en el Lidl en una oferta pero las podéis encontrar en cualquier sitio, os dejo el enlace de Amazon.

En cuanto a la maicena, viene muy bien tener un saquito lleno para espolvorear en cualquier momento y evitar que el fondant se nos pegue. Con cualquier tela de algodón podéis hacerlo, después lo atamos por arriba para evitar que se salga y ya lo tenemos.

Para guardar los Sprinkles una vez secos usaremos bolsitas de plástico con zip. Si no disponemos botes de plástico como los de las especias es una buena opción para guardarlos.

Usaremos los cortadores minis que tengamos por casa, no hace falta comprarlos aunque nunca viene mal tener ciertas formas. Lo ideal es que fueran de un tamaño pequeño como el de los sprinkles, los podéis encontrar en cualquier tienda de repostería, en Aliexpress e incluso en alguna tienda de chinos.

Os dejo el enlace de My Karamelli y una foto de los que yo tengo para que veáis a lo que me refiero.

Respecto al fondant, ya he dicho que no hace faltar comprar fondant de colores para estos Sprinkles ya que usaremos los restos que nos hayan ido sobrando de una tarta o de galletas. A veces quedan bolitas tan pequeñas que no sabemos qué hacer con ellas, así que la usaremos para estos Sprinkles.

Si ya tenemos todos los materiales preparados nos ponemos manos a la obra 😊

1.  Elegimos el color del fondant que más nos guste y lo estiramos del grosor que queramos. Cogemos el cortador-expulsor mini que más nos guste y empezamos a cortar sobre el fondant hasta que el fondant se acabe. Recordad que hay que limpiar las rebabas del fondant para tener un acabado perfecto. Amasamos los restos y estiramos de nuevo.

2. Dejamos secar el fondant y después guardamos en un botecito o en una bolsa con zip.

Con todos los cortadores-expulsores minis que existen podemos hacer cientos de sprinkles caseros y de cualquier color ya que nuestro límite somos nosotros mismos 😉

Aquí os dejo algunos más que hice, hay muchas formas diferentes.
El confeti lo hice con una boquilla redonda pequeña así que en verdad podéis usar lo que queráis para dar forma a vuestros Sprinkles

¡Ya tenemos todos nuestros Sprinkles listos para usar cuando queramos!

Recordad que aunque el fondant esté seco no hay que exponerlo a la humedad ni al calor porque enseguida se ablandaría de nuevo.

Podéis usarlos para decorar cupcakes, tartas, helados, batidos o lo que queráis.

Es un trabajo que lleva más tiempo que nada pero merece la pena tener unos cuantos en la recámara por si nos fallan los comprados 😉

Con esto y un bizcocho me despido, no sin antes contaros que el miércoles me gradué en la Escuela Anual de Repostería de Jessica Cakes.

Después de 10 meses de clases aprendiendo y perfeccionando todo lo que he podido me he graduado feliz de haber recorrido este camino con una compañía inigualable.

Así que aquí os dejo una foto de mi clase  😊

¡Mil gracias a todas!

El tiempo vuela ¡Helado de Kinder!

No sé cómo me ha podido pasar esto.

Yo estaba convencidísima que era en Julio y tenía la fecha marcada por todos sitios con colores llamativos para no olvidarme pero...

Al final lo olvidé

¡Porque la fecha estaba mal!

Y es que el día 26 de junio hacía un año que empecé a escribir en el Blog y yo como tonta pensando que era en Julio y lo pone bien grande.

26/06/2017

Pues nada, yo sin darme cuenta.

Con la ilusión que me hacia y todas las cosas que tenía preparadas para celebrar el añito de mi Blog...

¡Si es que no se puede estar en tantas cosas a la vez!

Bueno, no pasa nada, al siguiente año haré todo lo que no pude hacer este año y ¡más!

Mi cabecita... 😔

Pero  no va a ser todo malo ¿no?
Aunque llegue una semana tarde lo podemos medio celebrar ahora con este delicioso ¡Helado de Kinder!

No de Kinder Bueno, no, porque ese sabor se ha vuelto muy típico.

Este helado es de barritas o huevo Kinder 😉

Hay ciertos dulces que me encantan y las barritas Kinder son mi perdición pero en verano, con el calor, dejan de venderlas y de algún modo tengo que comerlas así que ¿por qué no en helado? 😊

La receta es de Chef Club aunque la he modificado un poco según mis gustos, vosotros podéis hacer lo mismo pero recordad que siempre poco a poco.

¡Vamos con la receta!

Helado de Kinder

Ingredientes:

 - 12 barritas Kinder

 - 200 ml de nata para montar

 - 40 ml de leche condensada

Ya véis que sólo tiene tres ingredientes, es muy fácil de hacer y está buenísimo.

Empezamos derritiendo las barritas Kinder en el microondas y dejando templar hasta que alcance la temperatura ambiente. En verano no se solidificará pero tened cuidado si hace frío porque enseguida se pone duro.

Montamos la nata hasta que tenga picos blandos, no hace faltar montarla del todo. Mezclamos el chocolate con movimientos envolventes y después la leche condesada de la misma manera.

Refrigeramos unas horas antes de meterlo en la heladera.

Cuanto esté bien frío lo meteremos en la heladera en marcha y esperaremos entre 20-30 minutos o hasta que el helado tenga la consistencia deseada.

Lo trasladamos a un recipiente hermético y congelamos al menos una noche. 

Recordad que para sacar las bolas deberemos sacar el helado del congelador unos minutos antes y si metemos la cuchara de helado en agua caliente, mejor que mejor.

¡Ya tenemos nuestro Helado de Kinder!

Es un helado que merece la pena tener en el congelador por si vienen invitados porque a todos les encantará este sabor.

¿Y qué más deciros?

Ha sido un placer escribir y preparar día a día todas las recetas que he compartido con vosotros.

Que un año se ha pasado volando y aunque tenía fe no pensaba que el año siguiente estaría escribiendo esto.

¡Pero aquí estoy!

Y sé que me quedan muchos años más de guerra para dar con mis dulces y no tan dulces.

A muchos les gustará y a otros no pero ¿qué más da? 

Hay que hacer lo que se quiere sin importar qué dirán los demás porque, al fin y al cabo, eres tú quien va a recorrer ese camino.

¡Así que por este año y por todos los que vendrán!

¡Mil gracias a todos! 😊