Este año está quedando claro el refrán de "hasta el 40 de mayo no te quites el sayo"
Porque vaya días pre-verano estamos teniendo... Tal vez esto debería ser lo normal y no lo que tuvimos el año pasado.
Por suerte, este domingo es el 40 de mayo y parece que a partir de la semana que viene empezaremos a tener una temperatura más veraniega, tal vez pueda poner mi champiñón 😉
De momento sigo con mi chaqueta puesta y tapándome por la noche y la semana que viene ya se verá 😂
Hoy os traigo la receta de una tarta que seguramente todos conocéis y habéis comido alguna vez, y si no es así espero que la preparéis y la comáis porque no tiene desperdicio ninguno.
Se trata de la Tarta Selva Negra.
Cuando me dicen el nombre de ciertas tartas las asocio rápidamente con sus ingredientes, como la Sacher y el chocolate negro, la Red Velvet y la crema de queso y la Selva Negra con el chocolate y las cerezas.
Así que para los que no sepáis la característica principal de esta tarta ya os la digo; las cerezas y las pepitas de chocolate.
Recuerdo que cuando era pequeña y mi madre compraba esta tarta yo me comía primero las pepitas y o virutas de chocolate y después la tarta, ya desde pequeñita me gustaba el chocolate 😊
La receta la he sacado de la web Pequerecetas, es una tarta muy fácil que consta de un bizcocho de chocolate y relleno de nata, el toque se lo da el almíbar de la cerezas y las propias cerezas que usaremos para decorar y para rellenar.
¡Vamos con la receta!
Tarta Selva Negra
Ingredientes:
* Bizcocho:
- 150 gr mantequilla a temperatura ambiente
- 150 gr azúcar
- 4 huevos
- 200 gr harina
- 16 gr levadura
- 40 gr cacao en polvo
*Relleno:
- 700 ml nata montar
- 6 cucharadas de sacarina en polvo
*Cobertura:
- 2 botecitos de cerezas en almíbar
- Pepitas de chocolate (las podéis conseguir en el Lidl)
Empezaremos preparando el bizcocho precalentando el horno a 170ºC y preparando el molde que vayamos a usar, yo usé uno de 15 cm aproximadamente.
Primero batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se integre y la mezcla empiece a blanquear. Añadimos los huevos uno a uno mientras batimos.
Tamizamos el cacao con la harina y la levadura y se lo añadimos en forma de lluvia, mezclaremos con una espátula con movimientos envolventes hasta que tengamos una masa homogénea.
Vertemos la mezcla en el molde y nos aseguramos que la mezcla cubre todos los huecos del molde, alisamos la superficie y horneamos entre 40 - 50 minutos, cuidado porque se quema con mucha facilidad.
Dejamos enfriar unos minutos en el molde y después sobre la rejilla, si no lo vamos a usar en ese mismo momento lo envolvemos en papel film y conservamos hasta su momento de uso.
Mientras enfría podemos preparar la crema, montamos la nata y cuando empiece a tener consistencia le añadimos la sacarina y continuamos batiendo hasta que haga picos duros, cuidado con sobrebatir la nata porque se convierte en mantequilla. Si hace mucho calor podemos añadir dos sobres de Natafix como estabilizante.
La reservamos en el frigorífico hasta el momento de uso.
Separamos el almíbar de las cerezas y lo metemos en un biberón, cortamos algunas cerezas en cuartos y las reservamos.
Cortamos el bizcocho en las capas que nos admita, a mi me salieron 4 capas.
Ponemos la primera capa de bizcocho sobre la base que queramos y la empapamos con el almíbar de las cerezas, rellenamos de nata y alisamos para que quede lo más igualado posible, repartimos algunas cerezas cortadas en cuartos y ponemos la siguiente capa del bizcocho.
Repetimos el mismo proceso hasta que la tarta quede completamente montada, recordad que en la última capa no hay que echar almíbar.
Empezamos a cubrir la tarta por los laterales con la crema, primero pondremos una capa sujetamigas y la meteremos en la nevera una media hora para que tenga consistencia.
Después, empezaremos a ponerle la verdadera capa de crema a la nata, recordad que hay que alisar con una rasqueta de pastelería para obtener unos laterales totalmente lisos y como la nata es tan suave hay que pasarla como si fuera una simple caricia.
Cuando tengamos la tarta totalmente cubierta con nata y alisada la meteremos en la nevera unas horas para que se asiente y coja consistencia. Debe sobrar crema para meterla en una manga y decorar la parte superior.
Yo he usado la boquilla 1M para hacer los rosetones encima de la tarta, después, he puesto unas cerezas encima, podéis usar las cerezas naturales o las que vienen en almíbar, las que más os gusten.
Además, he usado unas pepitas de chocolate para colocarlas en la parte inferior y en la superior, se pegan solas gracias a la nata.
Ya veis que es una tarta muy clásica y que no tiene nada del otro mundo pero está deliciosa.
Si tenéis un cumpleaños cerca y no sabéis qué tarta hacer aquí os dejo una opción para los adictos del chocolate, no os arrepentiréis 😉
¡Pasad un buen finde!
¡Hasta pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario